Dawn Stover ha publicado un artículo muy interesante, donde plantea algo que resulta muy importante para valorar objetivamente eso que llamamos materiales ecológicos, energía limpia, renovable,…
Inicialmente plantea lo ambiguo de conceptos como energía limpia o verde. Todos podemos tener una consideración diferente de ellos, pero todos podemos convenir en que el objetivo de la producción de energía, se ajuste a los principios del desarrollo sostenible. ¿Qué es el desarrollo sostenible? Según el informe Brundtland el desarrollo sostenible se basa en:
«Satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias necesidades». (Comisión Brundtland): Nuestro Futuro Común
Lo que significa que los recursos empleados para el desarrollo y el consumo sean renovables sin que esto implique un incremento en la demanda de energía. No parece que responda a estas condiciones, tecnologías que use recursos naturales finitos para la producción de energías alternativas. Así en el artículo se exponen las repercusiones de la energía solar, geotérmica, eólica, biomasa e hidráulica.
Es llamativo y muy ilustrativo pensar en el estudio, con cálculos matemáticos, en casos como el de California. Se presenta un escenario hipotético en el que todos los edificios se ajustaran a las normas de alta eficiencia, casi la totalidad de los coches fueran eléctricos y se duplicara la generación de energía generada con fuentes libres de emisiones. En ese estudio se concluye que sólo se reduciría un 60% la emisiones por debajo de los niveles de 1990 frente al 80% pretendido. Esto al margen de los costos ecológicos, económicos y sociales en toda su complejidad que requeriría adoptar este cambio. Como señala Dawn Stover, parece más efectivo controlar el fuerte crecimiento poblacional para frenar la cantidad de emisiones.
http://thebulletin.org/web-edition/columnists/dawn-stover/the-myth-of-renewable-energy
No obstante, dentro de nuestras limitaciones tecnológicas nos encontramos en la senda para alcanzar mayores logros, ya que contamos con una creciente conciencia de la necesidad de avanzar en este sentido. El camino que nos lleve a cambiar nuestro modelo energético hacia uno más sostenible y eficiente, es el que todos debemos seguir.